El Biomagnetismo es un notable
sistema terapéutico que hace uso de potentes imanes para combatir virus y otros
gérmenes que están en el trasfondo de muchas enfermedades.
La Magnetoterapia descubrió que
el Polo Sur o positivo (+) activa, impulsa y fortalece los procesos biológicos
del organismo, es dinamizador, vitalizante y proporciona energía. Por lo tanto,
está especialmente indicado en casos de debilidades y desgarros musculares,
fracturas de huesos y ligamentos, esguinces, rehabilitación, cicatrización de
heridas, etc.
Biomagnetismo como analgésico y
antinflamatorio
El Polo Norte o negativo (-) del
imán por el contrario es relajante, detiene los procesos nocivos para el
organismo y, está principalmente indicado para calmar o suprimir el dolor, así
como para combatir procesos inflamatorios.
La terapia de la polaridad.
A cada uno de los polos le
corresponde una forma de energía eléctrica distinta. El polo norte significa
detención, frena, y el polo sur avance, acelera, da vida y energía.
El polo Sur (+).- El polo Sur de
un imán transmite energía y vigor a los organismos vivos, refuerza los
componentes ácidos, estimulando la producción de proteínas, y acelera el
proceso de maduración. La energía del polo Sur es positiva y transmite efectos
positivos a los organismos vivos, semillas, animales y seres humanos. En el polo
sur de un imán hay un remolino de electrones que gira en el sentido de las
agujas del reloj, con una carga positiva.
El polo Norte (-).- El polo norte
de un imán produce una reducción del contenido ácido, además detiene las
infecciones, ayuda a cerrar heridas y aliviar distintas dolencias que
desaparecen sin dejar efectos secundarios. En el polo norte de un imán tenemos
un remolino de electrones girando en sentido contrario a las agujas del reloj,
con una carga negativa.
Efectos en las enfermedades.
Los campos magnéticos trabajan
sobre la circulación de la sangre, que contiene hemoglobina y hierro (la sangre
es de color rojo debido al hierro, el hierro con oxígeno, oxidado, es de color
rojo).
Sin el hierro no hay energía, y
sin energía se detienen el latido del corazón y la respiración, por lo que el
hierro es esencial para la vida, y la influencia de un campo magnético sobre el
hierro es considerable. Los campos magnéticos producen una pequeña corriente
eléctrica debajo de la piel, lo suficientemente fuerte como para causar efectos
biológicos como son: la reducción de dolor, la regeneración de células y
nervios, etc..
Un campo magnético atrae y repele
las partículas cargadas de la sangre, creando movimiento y calor. Esto dilata
los vasos sanguíneos, incrementando la circulación de la sangre y acelerando
los procesos de curación y de recuperación.
Normalmente en imanterápia se
aplica el polo NORTE (-) de un imán directamente sobre la zona a tratar, aunque
en algunos casos se utiliza el polo SUR (+).
No hay comentarios:
Publicar un comentario