¿Fue un veneno espacial lo que ayudó a crear vida en la Tierra?
La vida en la Tierra pueda deber su existencia a un envenenamiento llevado a través del sistema solar por asteroides y cometas, según un nuevo estudio.
El formaldehído o metanal (CH2O) es un gas incoloro que a menudo se disuelven en agua para hacer un líquido llamado formalina, que se utiliza en varios productos industriales, tales como materiales de construcción, desinfectantes y líquido para embalsamar.
La molécula no dura mucho tiempo en su estado natural en la Tierra sin la intervención humana. Eso es una suerte para nosotros, porque el formaldehído reacciona fácilmente con otras sustancias químicas.
"El formaldehído es tóxico porque interfiere en muchas reacciones metabólicas y puede bloquear las funciones críticas de la proteína en el cuerpo”, dijo el coautor del estudio George Cody, un químico de la Institución Carnegie para la Ciencia en Washington, DC.
De acuerdo con la Agencia de Protección Ambientalde los EE.UU, la exposición al formaldehído puede causar problemas respiratorios, náuseas, irritación en los ojos y erupciones cutáneas. El producto químico también se ha encontrado que causan cáncer en animales de laboratorio.
Sin embargo, aunque es extraño encontrar formaldehído de manera natural en la Tierra, es una molécula común en el espacio.
"No es tan común como, por ejemplo, el hidrógeno o el agua, pero sí se encuentra omnipresente en la galaxia", dijo Cody. "Dondequiera que la gente busca las moléculas en la galaxia, encontrarán formaldehído."
¿Cocinó el formaldehído la materia orgánica?
Debido a su abundancia relativa y alta reactividad, Cody y su equipo de formaldehído sospechan que este gas podría haber ayudado en el proceso de creación de la vida.
Los científicos creen que estos organismos podrían haber sido responsables de sembrar la Tierra primitiva con los materiales esenciales para la vida y su evolución, como el carbono y el agua.
Para probar esta teoría, el equipo usó formaldehído como base para la síntesis de los materiales orgánicos descubiertos en ciertos meteoritos y fragmentos de asteroides que se estrellaron en la Tierra.
Los investigadores encontraron que la sustancia que resulta similar al alquitrán no es sólo parecido al material del meteorito, sino que también es similar a la materia orgánica capturada en 2004 durante un sobrevuelo del cometa 81P/Wild 2 en la misión Stardust de la NASA. Basándose en estos hallazgos, Cody cree que el formaldehído interestelar se encontraba en los cometas y asteroides durante el nacimiento del sistema solar. Con el tiempo la sustancia se sometería a reacciones químicas que terminarían formando moléculas orgánicas complejas.
Estos cometas y asteroides podrían haber chocado posteriormente con nuestro planeta dejando detrás de sí su preciosa carga rica en carbono.
El veneno ayudó al carbono a sobrevivir en la tierra fundida
Según una teoría, la Tierra primitiva era poco más que una masa fundida después de sufrir una colisión hace unos 4450 millones años con un objeto del tamaño de Marte, lo que probablemente creó la Luna. Mientras que la Tierra se encontraba en este estado caliente y líquida, los elementos ligeros y moléculas como el hidrógeno, el agua y el carbono se habría evaporado inmediatamente al espacio.
“Si el carbono contenido en los cometas y asteroides bombardeó la Tierra durante esta fase sólo existía en forma de moléculas de carbono simples, tales como el formaldehído, que también se habría evaporado rápidamente”, dijo Cody.
Pero si el formaldehído se hubiese transmutado en orgánicos más complejos durante su incubación prolongado en el espacio, las moléculas resultantes habrían sido lo suficientemente pesadas para evitar que se evaporasen.
En sus experimentos, Cody y su equipo calentaron el formaldehido en su forma orgánica a una temperatura máxima 2.500 grados Fahrenheit y encontraron que esta se mantenía intacta.
Otros polímeros basados en el carbono se transformaron en moléculas más simples o se vaporizó al calentarse durante el experimento.
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