¿Calidad en la educación? La educación basada en competencias.
Por
definición la palabra competencia tiene varias acepciones, según Real Academia
Española el término competencia proviene del latín competentĭa, y la señala que
es relativo a “pericia, aptitud, idoneidad para hacer algo o intervenir en un
asunto determinado”.
Ya aplicado a la educación según la Organización
para la Cooperación y el Desarrollo Económico: “Capacidad para responder
exitosamente a una demanda, tarea o problema complejos movilizando y combinando
recursos personales (cognitivos y no cognitivos) y del entorno” (OECD, 2005).
En base a estos conceptos uno puede
formularse su propia concepción, puesto que se a distribuido mucho con información
acerca de las innovaciones en la educación pero no de manera clara, ya que el
mayor medio masivo de información que es la televisión solo nos muestra las
posturas tomadas en base a lo que es la educación basada en competencias y nunca
profundizan en ese tema tan delicado e importante como es.
Aunque poco se conoce las posturas en
contra y a favor de esta innovación en la educación por parte de los docentes
en nuestro país que son unos de los actores en este proceso, una realidad es
que la educación basada en competencias viene a modificar las instituciones
educativas la esencia de su ser y de su quehacer en procesos de planeación, organización
académica y evaluación, con el propósito de adecuarse a los retos que imponen
las actuales circunstancias, y por el papel estratégico que éste tiene para el
desarrollo social, y así enfrentar los desafíos de la vida cotidiana por parte
del otro actor que es el alumno.
Aun cuando son numerosos los autores
que abordan el tema de competencias, sin embargo, es posible advertir en las
conceptualizaciones ciertos elementos que son característicos en su definición:
En primer término confluyen los conocimientos, los procedimientos y las
actitudes; otro aspecto señala que sólo se definen con respecto a su aplicación
en un desempeño, un tercer punto dice relación con la experiencia, que es
importante como medio de constatación y evaluación, y finalmente el contexto,
el que define en cierto modo la eficacia del desempeño; ello explica que una
competencia puede ser evidenciada dependiendo del contexto en que se aplica.
Habermas, plantea una idea muy
interesante y donde es posible encontrar un paralelo con el tema de
competencias. Expone que existen tres tipos de intereses, señalando que dichos saberes no sólo se refieren al
pensamiento, sino que implican acciones. Entonces, define: intereses técnicos,
prácticos y críticos.
El primero de ellos (técnico) está
basado en la necesidad de supervivencia, tanto en su vertiente
reproductivo-biológica, como al aspecto social. Este saber tiene
correspondencia con las competencias básicas; los intereses prácticos se
corresponden con las competencias técnicas por cuanto se los define como:
“un interés fundamental para
comprender el ambiente mediante la interacción, basado en una interpretación
consensuada del significado”
En tanto, los intereses críticos se
relacionan con las competencias transversales o genéricas, ya que ambas se
basan en asumir una postura, comportamientos y actitudes generales, de índole
valórica, propias de una persona autónoma y con responsabilidad individual.
A modo de cierre, la realidad es que
la educación debe enfrentar las
exigencias de un mundo en constante cambio, para lo cual, aunque la institución escolar ha estado
constantemente puesta en tela de juicio, aun tiene mucho que aportar a la
formación del hombre. Mediante este proceso de formación, que transcurre
durante toda la vida, se debe tener en cuenta a la educación no solo como una formación
profesional (Papel, titulo, diplomado, etc.), sino que este vaya bien
respaldado en conocimientos teóricos que permitan al egresado entender,
explicar y actuar sobre la realidad, así como en el uso de las tecnologías de
la información, bases para la educación permanente y también en competencias básicas y profesionales. Algo que al parecer se
estaba olvidando en el sistema educativo actual donde el trabajo ético por
parte de los actores inmersos en el proceso de la educación, se estaba haciendo
a un lado y si se lograra asumirse la educación basada en competencias se lograría
un proceso continuo y trascendente en la educación de nuestro pais.
Bibliografía:
Ines Aguerrondo, conocimiento complejo
y competencias educativas. UNESCO oficina internacional de la educación.
Referencias Bibliograficas:
Real Academia Española. (2001).
Diccionario de la Lengua Española. [versión electrónica]. Recuperado el 11 de
Septiembre de 2007, de http://www.rae.es/
Revista de la Electronica de desarrollo
de competencias Año 1, No1 Diciembre del 2007, de http://revistacompetencias-redec.blogspot.mx/2008/01/ensayo-reflexiones-sobre-competencias-y.html.
Complementos:
Hacia el enfrentamiento crítico del
enfoque de educación basada en competencias: mito y realidad. por Dra. María
Rosa Alfonso García de http://letras-uruguay.espaciolatino.com/aaa/alfonso_garcia_maria_rosa/hacia_el_enfrentamiento_critico.htm
Video: Definicion de competencias,
Dra. Laura Frade Rubio, doctora en psicología educativa tomado de http://www.youtube.com/watch?v=x8KC_hZTK3A&feature=related
Muy bien el manejo del lenguaje en tu ensayo, la estructura y estilo, pero faltó incluir algún teórico de los que revisamos en el verano
ResponderEliminarChales, va intrínseco. Realmente me base en ellos creo!!! Pero si, creo que si.
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