Las diversas posturas de la sociedad
Mexicana frente a este enfoque, la mayoría de las veces están tomadas a partir
de una basta desinformación al respecto, y en otras tantas a partir de la
simple negación a cualquier opción de cambio que implique realizar un esfuerzo
extra del que estamos acostumbrados, para realizar este ensayo tuve que
adquirir una de esas tantas posturas que existen, topándome con la gran
sorpresa de que no solo yo estaba en la dificultad de ¿a que lado hacerme?, si
no que los estudiosos del enfoque también tenían diversas complicaciones al
tomar partido, por un lado Tobón(1) expresa que es necesario establecer la construcción
conceptual de este enfoque, y afirma que las competencias son un enfoque y no
una teoría pedagógica, por otro lado Burnier(2) habla en su artículo de una Pedagogía
de competencias, mientras que Ángel Díaz Barriga(3) cuestiona al enfoque de competencias dice que
estamos frente a un disfraz de cambio y no una alternativa real, por lo tanto una
vez que leí estos textos puedo fundamentar mi postura en la educación basada en
competencias.
Al hablar de “competencias” nos
referimos a las capacidades de poner en operación los diferentes conocimientos,
habilidades, pensamiento, carácter y valores de manera integral en las
diferentes interacciones que tienen los seres humanos para la vida en el ámbito
personal, social y laboral, esto debido a que las exigencias a nivel mundial
para integrarse a una sociedad o al campo laboral van en aumento y se exige de
las personas, que así lo desean, que sean “capaces” de desenvolverse en mas de
un solo ámbito laboral, por lo tanto en México en el año 2008 a través del artículo
444 propuesto por la Lic. Josefina Vázquez Mota se introduce esta reforma
educativa a nivel Bachillerato (4), sin embargo ha existido mucha controversia
puesto que exige una docencia de calidad,
y las criticas a este enfoque por competencias han aumentado, puesto que
se piensa que se orienta a una educación
laboral, descuidando lo disciplinar, puede tener razón pues se busca que los
estudiantes se conecten inmediatamente al plano laboral, pero cabe señalar que
no se opone a lo disciplinar y científico al contrario busca que el estudiante resuelva cualquier
tipo de problema de manera creativa, otra critica es que se descuida el “ser”
de la persona, por el contrario para poder realizar cualquier actividad con
idoneidad se debe tener bastante atención en el en la dimensión
afectivo-motivacional, pues a partir de eso surgen las ganas por el hacer tal o
cualquier cosa que se presente de manera responsable y con disposición de
aprender y por otro lado se dice que es lo que siempre hemos hecho, principal
critica de los docentes que se resisten al campo y no tiene “ganas” de estudiar
con profundidad este enfoque ya que exige una preocupación extra por la aprendizaje
que obtendrán los alumnos y los recursos didácticos que requieren para
desarrollar el lado creativo de cada uno de ellos y planificar no solo una
enseñanza dentro del salón de clases sino el tiempo de trabajo autónomo de los
estudiantes (1).
Para Díaz Barriga (3) el enfoque por
competencias esta inmerso en un mar de posibilidades, por el simple hecho de
hablar de competencias genera un amplio lenguaje en el terreno de la educación,
proponiendo distintas clasificaciones de las competencias sin existir una clasificación
completa, racional y funcional que oriente los procesos de diseño curricular y
los sistemas de enseñanza. Su empleo en la formación de técnicos a rendido
buenos dividendos como es el caso de los CONALEP’s en México y los CEBTis, Entre
sus principales aportaciones se encuentra el volver a plantear el sentido del
aprendizaje en el contexto escolar determinar cual es la finalidad de lo que se
enseña, llenar la cabeza de información que se retenga y sea reproducida en los
esquemas y textos mostrados en la escuela, o formar un individuo con capacidad propia
de razonamiento y con un conjunto de habilidades que le permitan resolver
situaciones cotidianas. Por lo tanto es un enfoque que carece de definiciones
curriculares y esta lleno de posibilidades sin explorar, para él, se quiso abarcar
mucho sin tener bien definidas las bases de las competencias educativas,
considera que es un excelente plan de trabajo en el campo de la educación pero
carece de innovación, es un plan que no se preocupa por rescatar las cosas
buenas de los planes anteriores y mantenerlas, si no que pretende restructurar
todo un sistema, por lo cual señala que o el reto del enfoque de las
competencias en la educación es enorme, ya que requiere clarificar su propia
propuesta, lo cual significa construir un lenguaje que contenga tanto su
propuesta como sus límites. Esto es, se requiere evitar la diversidad tan
amplia de interpretaciones que desde la perspectiva de las competencias se están
elaborando en el campo de la educación. Al mismo tiempo, se requiere explorar
con mayor cuidado las dimensiones pedagógicas de un tema, que evidentemente
reinicia una discusión sobre el sentido del aprendizaje escolar, pero que la
mayoría de los autores que lo abordan sencillamente lo omiten o lo desconocen (3).
Como nos podemos dar cuenta, las
posturas de estos dos autores son completamente opuestas in embargo tienen en común
la finalidad de las competencias que es centrarse en el aprendizaje d elos
alumnos, Tobón planteándonos un enfoque por competencias “idóneo” en el que
todos será perfecto y la responsabilidad del aprendizaje es del maestro y por
otro lado Días Barriga mostrándonos las debilidades del enfoque donde de algún amanera
me queda mas clara la postura de la mayoría de los profesores que resisten el
cambio, pues ven ese hueco y términos tan faltos de definición donde toda la
responsabilidad es de ellos, sin embargo el enfoque propuesto esta lleno de vacíos
que los hacen optar por utilizar sus propios recurso y métodos de enseñanza
tradicional, creo que el enfoque por competencias no deja de ser una muy buena
idea de lo que sería bueno hacer pero si considero que es necesario establecer
ciertos limites entro del currículo de las competencias, pues se pretende enseñar
TODO pero no hay un camino definido, a mi punto de vista la propuesta de una educación
por competencias donde se eduque para la vida, es decir que el alumno pueda
aplicar todo el conocimiento que adquiera en su vida diaria y le demás
posibilidades de integrarse en un plano laboral es muy buena y creo que es muy
importante explorar esa posibilidad para que la educación en México sea
diferente, pero también creo que no podemos dejar toda la responsabilidad al
maestro y mucho menos decir que hay resistencia al cambio y que no lo quieren
aplicar porque no tienen “ganas” de estudiarlo mas a fondo, creo que es
importante que las personas que proponen este enfoque definan el camino a
seguir para obtener el objetivo principal de la educación basada en
competencias.
Bibliografía
(1) Sergio Tobón, “ASPECTOS BÁSICOS DE
LA FORMACIÓN, BASADA EN COMPETENCIAS”, Proyecto Mesesup, 2006
(2)
Rocío A. Andrade Cázares, EL ENFOQUE POR COMPETENCIAS EN EDUCACION, Septiembre
2008
(3) Angel Diaz Barriga, El enfoque de competencias en la
educación.¿ Una alternativa o un disfraz de cambio?
(4) acuerdo 444, Lic. Josefina Vazquez
Mota, México, 2008´
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Buen trabajo
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