Convivir con la naturaleza (foto de Jaime Cristóbal López)

jueves, 7 de marzo de 2013

Escuchar música...


¡es bueno para la salud!

El filósofo alemán Federico Nietzsche decía que "la vida sin música sería un error" y lo cierto es que para millones de personas, es una compañía indispensable cada día y una de sus artes favoritas. La industria musical es una de las más importantes del mundo y la popularidad que alcanzan cantantes e instrumentistas no tiene comparación. Esto se debe al inmenso poder que ejerce sobre nosotros; nos ayuda a manejar los estados de ánimo, relacionarnos con otros y construir una identidad. 

Además de los beneficios a nivel psicológico, diversos investigadores han comprobado que la música puede ejercer una influencia positiva sobre la salud física. Aquí tan solo algunos ejemplos de lo que escuchar a tus interpretes favoritos puede hacer por ti:

Mejorar la circulación; investigadores de la Universidad de Maryland se valieron de ultrasonidos para demostrar que el diámetro de los vasos sanguíneos aumenta hasta en un 25% cuando escuchamos nuestra música favorita. 

Reducir el estrés; escuchar música, especialmente clásica, reduce la presión arterial y la frecuencia cardiaca. Usn estudio realizado en el Group Health Research Institute encontró que tumbarse bajo el sol y escuchar música es tan efectivo como recibir un masaje relajante.

Rendimiento deportivo; Costas Karageorghis, médico de la Universidad de Brunel y autor del libro "Inside Sport Psychology", sostiene que escuchar música mientras se practica ejercicio puede aumentar el rendimiento hasta en un 15%. Escuchar una canción que te agrade puede ayudarte a abstraerte del entorno lo que eleva la la concentración. 

Efecto analgésico; expertos de la Universidad de Manchester en Reino Unido concluyeron que la música a más de 90 decibelios (más o menos el volumen de una aspiradora trabajado), provoca que el sacculus, estructura del oído interno, estimule la producción de endorfinas, hormonas que juegan un papel relevante en la regulación del dolor. Así que ya lo sabes, revisa el calendario y acude al siguiente concierto de rock. 

¿Cuál es tu música favorita? 

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